LOS RETOS DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN LA ERA DE LA TECNOLOGÍA

1. CUÁLES SON LOS CAMBIOS QUE HA PROVOCADO EN LA SOCIEDAD LA GLOBALIZACIÓN Y LA REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA?
2. CUÁLES SON LAS HABILIDADES QUE SE LE EXIGEN A NUESTROS JÓVENES ANTES ÉSTOS CAMBIOS?
3. ESTÁ LA UNIVERSIDAD TRADICIONAL PREPARADA PARA DAR RESPUESTA A LAS NECESIDADES DE FORMACIÓN QUE HOY DÍA TIENEN NUESTROS JÓVENES?
4. CÓMO DEBE SER LA UNIVERSIDAD DEL FUTURO?
5. CUÁL SERÁ EL FUTURO DE LOS TÍTULOS UNIVERSITARIOS?

Buenas noches grupo.

La globalización, la mundalización y la revolución tecnológica, están presentes en nuestra sociedad antes de que se hablara de la “sociedad de la información”, el avance progresivo y creciente de la ciencia y la tecnología han venido transformando de manera progresiva y acelerada las formas de comunicación y el modo de vivir de la comunidad global o mundial, afectando de manera radical todos los espacios de la vida social, política, científica, laboral y personal de los individuos que acceden hoy en día con mayor frecuencia a estos recursos que nos ofrece la industria capitalista. Sin duda alguna, ésta era tecnológica es una de las más prominentes de nuestra época moderna, en estos tiempos se hace necesario estar en contacto directo con todos los recursos ofrecidos por las TIC’s, donde el conocimiento es universal y se encuentra a un click de distancia del individuo. En ese sentido, las formas de comunicación mutan a una más eficiente, donde la distancia y el tiempo son los menos limitantes. En nuestra sociedad venezolana, hasta hace pocos años seguíamos inmersos en las posibilidades de recursos bibliográficos físicos para acceder al conocimiento, a partir de la introducción de los recursos tecnológicos como el computador y posteriormente el acceso a la autopista de la información, acompañado de diversos artefactos que facilitan esta conexión, la sociedad plena comenzó un transformación vertiginosa, poniéndose en sintonía con la globalización.

La educación, como hecho social generador de cambios y de transformación, no escapa a estos efectos, que en términos generales podríamos denunciar como positivos, sin embargo en la actualidad, a pesar de ya pertenecer a esa comunidad virtual mundial, existen muchos tabúes con relación al uso de las herramientas tecnológicas en la comunidad educativa, esos temores son en principio el principal reto a vencer por nuestra sociedad educativa. En consecuencia, la educación debe formar parte de la revolución de la información y tecnología, incentivando a las y los niños, adolescentes y jóvenes a interactuar cada vez más con las TIC’s. En ese sentido hay esfuerzos concretos de parte del estado para materializar la meta de incorporar a toda la población estudiantil a este torbellino de tecnología, sin embargo opinó que a pesar de esto, no hay una verdadera exigencia al estudiantado para que el uso de estas herramientas sean tan eficientes y efectivas como pueden ser, son en su defecto herramientas de recreación y esparcimiento. Es necesario que tanto el docente como el estudiante se planteen nuevas formas de abordar estos recursos como mecanismos de formación, donde los roles de ambos cambian sustancialmente, convirtiéndolos en teleformadores en forma bidireccional, el estudiante, fortaleciendo sus habilidades de investigación, búsqueda, análisis y autoaprendizaje y el docente como mediador de este proceso.

La mayoría de las universidades venezolanas son tradicionalistas y aún resistentes al cambio que propone ésta era tecnológica, considero que están iniciadas en ella más continúan sub-utilizando sus recursos. Se conoce que algunas ya han experimentado con posibilidades de educación a distancia y aulas virtuales, sin embargo hay mucho que avanzar al respecto para lograr empoderarnos con firmeza de ésta estrategia pedagógica, comenzando por la transformación de la estructura curricular y de la forma en que se imparte el conocimiento en el sistema presencial, además de la redimensionar la relación docente-estudiante.

Al respecto opino, que la universidad del futuro, debe romper las barreras del tiempo y el espacio, como ya lo ofrece este sistema virtual, ganando espacios para administrar la forma en que enseñamos y aprendemos, dándole cabida a las nuevas tecnologías en las aulas y progresivamente ir avanzando firmemente hacia la transformación de la educación presencial, promoviendo en las y los estudiantes cada vez más la apropiación de estos recursos como medios de comunicación universal, que desmitifican la presencialidad y fortalecen la visión de estudios a distancias guiados o mediados a través de herramientas como esta cartelera virtual.

Son grandes los retos que nos esperan: la transformación curricular para adecuarla a estas nuevas formas de aprender-aprender; dotar de insumos, materiales y equipos tecnológicos a todos los centros educativos en todos sus niveles y modalidades para el uso de docentes, estudiantes y comunidad; fortalecer la formación permanente del docente en materia de tecnología, adentrándose en el uso recurrente de ésta como mecanismo de auto-aprendizaje para sí y para su praxis educativa. En relación a los títulos universitarios, pienso que se debe romper con el burocratismo que envuelve la obtención del mérito académico, deben flexibilizarse los procesos haciéndolos menos rigurosos, suprimiendo gastos de papelería y trámites administrativos por demás agotadores. La nueva era, nos invita a transformar y este es un aspecto que no debe quedar exento  de cambio.

Hasta el próximo encuentro.